Empecé a practicar pilates por mi patología de columna, y a la vez que mejoraba, conseguí el equilibrio perfecto entre cuerpo y mente. Es una disciplina que me encanta, así que cualquiera que sea tu motivo para empezar, como docente vocacional que soy, aquí estaré para ayudarte a conseguir tus objetivos a la misma vez que mejoras la conciencia y el control de tu cuerpo.